Los que navegan por mi mar...

domingo, 26 de febrero de 2012


Yo ya conocía la respuesta,
los riesgos, el dolor, todo conocido era.
Te acercaste a mi y te abrí mi puerta.
Sabía del error, sabía de la tristeza,
sabía que para mi era esta guerra.
Aun sabiendo todo lo que sabía,
permití que entrases en mi vida.
Hoy que todo pasó, reconozco mi valor.
Me lancé sin paracaídas.
En el momento mas vulnerable de mi vida,
puse en tus manos lo más bonito que era,
entregué mi ternura,
mi confianza, mi corazón,
en tus manos me puse toda yo.


No guardé nada, ni protegí lo mas tierno,
no quise pensar, ni escuchar,
confié tanto en ti, que mi confianza fue ciega.
Miraba tus ojos tiernos, tus manos duras,
pensaba que tu corazón era fruta madura,
que no corría riesgos, que el amor dura.
Y en ese camino dejé mi cordura.
Destrozada me encontraste, me mimaste,
recompusiste un poquito la estructura,
y al primer revés, con la primera bruma,
me empujaste de nuevo al vacío, 
no me diste oportunidad ninguna.



5 comentarios:

  1. El q ama así siempre gana y la vida q es justa te recompensará devolviendote todo eso y mucho más. besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. De momento no he visto justicia en mi vida, quizás esté un poco ciega.

      Eliminar
    2. es una sensación q a veces tb tengo , otras veces dio gracias a los ados por lo q tengo , depende del estado emocional. Si se esta bien la vida parece mas justa

      Eliminar
  2. No sé que decirte Yashira pero no se puede jugar con fuego, no podemos entregarnos por entero cuando vamos a ser un juguete en manos que no lo merecen.

    No dejes que hagan de ti un juguete roto nunca más.

    Un beso,

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tienes razón, no se puede jugar con fuego, pero a veces creemos en los milagros.
      Intentaré no volver a permitirlo, saludos Sau,

      Eliminar

Gracias por dejar tu comentario. Me gusta saber que has pasado por aquí.