Hoy quien escribe no es Yashira, lo que escribo no es ninguna ficción poética, como en algún momento alguien ha escrito por aquí. Quien escribe es Maribel, porque lo que deseo transmitir es Agradecimiento, así, con mayúsculas, a mis seres queridos, por estar ahí, incondicionales, y pedirles mis disculpas, se que últimamente les he provocado alguna preocupación al dejarme llevar por el dolor. He pedido ayuda a personas que no podían oírme, hoy deciros, a vosotros, los que no habéis sabido, no habéis podido estar ahí, o vuestro comportamiento me ha provocado más angustia, que en mi corazón no cabe el rencor, ni el odio, sólo el amor, y a pesar de no haber recibido el apoyo, ni la ayuda necesitada, os deseo lo mejor, y mi cariño siempre lo tendréis, aunque haya silencio o distancia, se que siempre, en cada momento, se hace lo que se puede y ¿quién va a pedir más?.
Me hace feliz poder agradecer también las palabras de ánimo y de consuelo, que sin conocerme, me habéis hecho llegar como un regalo a través de este blog pequeñito, recién nacido, apenas dos meses de vida, que me han servido de tanta ayuda. Llevo ya un largo tiempo desgastándome en situaciones difíciles que la vida ha ido poniendo en mi camino, y los últimos acontecimientos han precipitado la situación. Mi cuerpo no es tan fuerte como yo, y mi salud se ha visto resentida, el motivo de estas palabras es ese, decir que quizás durante un tiempo a veces notéis mi ausencia, voy a intentar que no suceda, pero si sucede, sabed que no será abandono, simplemente estaré recuperando fuerzas.
