Los que navegan por mi mar...

sábado, 3 de diciembre de 2022

Me arrepentí




Te permití llegar a mí

cuántas veces me arrepentí


La vida entró con tu aliento

se extendió por todo mi cuerpo

y yo

necesitada de afecto

acepté cada roce

cada palabra

porque ellas

las palabras 

también acariciaban mi alma

la inflaban de ilusión


Te permití llegar a mí

lo permití


Aun cuando estabas lejos

seguía escuchando tu voz

seguía aceptando caricias

baratas

vacías

permitía mentiras

repartía perdones

permitía vejaciones

eso eran

aunque no quisiera verlo


Cuántas veces me arrepentí

cuántas veces


Consciente de mi amor

pagabas con mentiras

mirándome a los ojos

sin pudor 

decías 

“te amo”

besando otros labios

conociendo otro cuerpo

como loro repetías

vacío de sentimientos

lo que ya había muerto

eso es vejación

falta de respeto


Es de cobardes

manchar lo hermoso

maltratar lo bello

lo humano

la magia que posé en tus manos


Es de cobardes

no decir

que ya no es momento

que en tu corazón

murió lo nuestro


Cuántas veces me arrepentí

de permitirte llegar a mí

© Yashira  2022



domingo, 27 de noviembre de 2022

Recomponiendo





El frío, 
no solo agrietó mis labios,
agrietó mi corazón,
helado desde aquel día
que, de un portazo,
cerraste la vida.

Añoro los besos
que todo lo recomponían,
ese abrazo que,
tan solo en un segundo,
juntaba mis pedazos.

No añoro los silencios,
ni tampoco los hartazgos,
cierro los ojos a las lágrimas,
y los oídos a las palabras
que hacían daño.

Nadie leyó mi diario
donde describí, cada risa,
cada ilusión,
grabé con lágrimas amargas
los momentos de miedo,
la tensión,
y los años que pasaron
para deshacerme del dolor.

El frío agrietó mi corazón,
el tiempo
recompuso los silencios,
reparó los labios,
y tras el portazo,
los momentos amargos
juntaron, uno a uno,
todos mis pedazos.

© Yashira  2022


lunes, 25 de julio de 2022

Merece la pena

 




Qué bonito,

es bonito rozar tus manos,

sentir tu aliento en mi aliento,

besar tus labios, tus ojos.

besar tus manos, tu cuerpo,

que bonitos los juegos

en los que participamos,

apenas sin aire,

como peces sacados de contexto.

Qué bonitos tus ojos,

pequeños, risueños,

repartiendo miradas

de ternura, de silencio,

nada más,

no hace falta más,

tu presencia llena mi pecho.

Respirar hondo,

reír y volver al juego,

ser vida y no saberlo,

qué bonito,

ilusión,

mi sonrisa lo dice todo,

qué bonito 

imaginar si fuese realidad...

Aunque al despertar,

se esfume en las tinieblas

distorsionadas de la memoria,

aunque se evapore cada 

caricia, cada abrazo,

ha merecido la pena

la sonrisa con la que hemos despertado. 

© Yashira  2022






sábado, 1 de enero de 2022

Volar sin miedo




Con las telarañas del dolor, 
aún, 
enredadas entre mis dedos,
con las uñas rotas
de rasgar muros viejos; 
respiraré hondo, profundo,
me permitiré reír,
iluminar, 
calentar. 

No dejaré al miedo
cerrar mis puños,
ni tapiar mis labios. 

Aún con tierra en las manos,
atraparé ilusiones,
con lágrimas en los ojos,
iluminaré pasiones.
Porque no hay miedo que tanto dure,
ni dolor que doblegue para siempre.

Volver a creer. 
Creer y despertar.
Despertar y soñar.
Las manos, los labios,
los ojos, la piel,
destapan y rasgan,
empujan con fuerza,
tapan pozos ciegos, profundos,
iluminan con luz y verdad.

Abriré caminos
con mis pies descalzos;
volveré y sanaré,
romperé las cadenas que atan el sueño,
las que me atan al suelo,
y volaré,
volver a mí y volar alto.
Sin tristeza,
sin dolor,
sin rabia,
sin rencor. 

Permitiré a la luz,
permitiré al amor,
volver a mí. 
Y alcanzaré mi verdad,
aún con telarañas
enredadas en los dedos, 
volaré alto, lejos,
arrebatando miedos,
descorchando fieras
escondidas bajo la piel. 

Y volar. 
Volaré tan alto
que solo me podrás soñar. 




© Yashira  2022