Sin falsas promesas...

En esta tierra muerta,

seca de desesperanza,

ni la luna ni el sol,

se atreven a asomar la cara.

Estoy sola, cubierta de maleza,

de vidas muertas, de hambre de guerra.

Cuando alces la vista,

mira al frente, sin luto, sin miedo,

mira como mira la vida cuando hay un duelo.

Entre la desolación, 

un brillo y una flor.

Cada surco representa un año de dolor,

no los cuentes, ya no cuentan,

sólo mira al frente,

levanta la vista y cree en el azar.

En la posibilidad de alcanzar

todo eso que hasta ahora te negó la vida.

Si clavas tus manos en la tierra fría

de ella nacerá la paz,

no mas injusticia, ni mas inmundicia,

de entre tus dedos, escurriendo terrones

nacen hombres llenos de ilusiones,

creerán en ti, levantarán las manos,

seguirán tus pasos,

y en cada trecho aclamarán tus guerras.
Pero tú, en tu soledad
pedirás palabras tiernas,
Una vida llena y menos  
falsas promesas.